jueves, 24 de diciembre de 2015

Un buen año

Una semana para que empiece un nuevo año, y es hora de hacer balance de este 2015. 
2015 ha sido un buen año, mejor que el anterior, pero no mejor que el que viene. 
He conseguido cumplir la gran mayoría de mis propósitos.
He conocido este año a personas increíbles, aunque también es cierto que he perdido a amigos que creía que serían para siempre, pero eso me ha hecho aprender a valorar a los amigos de verdad. 
He reído, mucho, muchísimo. También he llorado, mucho. 
He hecho cosas que jamas pensé que podría hacer, he vivido nuevas experiencias, he afrontado miedos y sobrepasado mis limites.
He salido de fiesta, me he emborrachado y he bailado hasta caer rendida. 
También he querido, como nunca había querido, me he ilusionado, he besado, pero también me han roto el corazón y me han mentido. 
Y poco a poco me he ido conociendo un poco más.
Sin duda este año he vivido muchas cosas, no todas buenas. Pero cada uno elige con lo que se queda. Y yo me quedo con todos los buenos momentos que he pasado y con todo lo que he aprendido.





domingo, 20 de diciembre de 2015

Juntos

No puedo parar de imaginarme junto a ti. 
Nos imagino a los dos juntos volviendo de haber pasado el día entero en una playa alejada de la ciudad. Un día increíble, de risas, besos y juegos. Siendo la envidia de todos, por que sí, juntos somos perfectos.
Nos imagino en el coche, cantando a grito pelado nuestras canciones favoritas. Y mientras se va haciendo de noche yo quedarme dormida a tu lado. Y tú sin poderme quitar los ojos encima y pensando lo jodidamente afortunado que eres de tenerme a tu lado, y lo preciosa que estoy cuando duermo. 

martes, 8 de diciembre de 2015

Puñalas

Una puñalada, directa, inesperada. Joder, como duele.
Con esa puñalada, te das cuenta que jamás le has importado.
Pero es que a lo mejor todo ocurre por una razón, tal vez esa persona nunca debía haber entrado en tu vida. Y que, a la larga te das cuenta de que estás mucho mejor sin ella, aunque al principio el dolor de su traición se te haga insoportable. 
Es en estas situaciones en las que de demuestra de qué estamos hechos. 
Hay dos opciones; Quedarse en la cama, o, seguir como si nada hubiese pasado. Llevar el dolor por dentro, ser fuerte, y hacer de tripas corazón. Y sobretodo enseñarle al mundo la mejor de tus sonrisas

domingo, 6 de diciembre de 2015

La nostalgia de Diciembre

Al final la sensación de nostalgia vuelve, como cada mes de Diciembre. Y resulta que se ha ido otro año, en un abrir y cerrar de ojos. Te das cuenta, de que todo lo que sueñas en Enero, lo sigues deseando en Diciembre.
Y comprendes que por ejemplo, los amores de verano, son sólo para aprender. Y que los mejores momentos de reflexion son durante la noche, donde te encuentras contigo mismo, y dejan de existir los demás.
También empiezas a entender que las sonrisas no son el reflejo de la felicidad, sino un escudo que permite adaptarse al mundo que te rodea.
Que no todo aquel que te sonríe es tu amigo, pero si quien te dice las cosas yendo al grano.
¿Y qué hacer antes esta situación?
Quizás volver a soñar con la infancias, donde el único dolor que valía era el de las heridas de las rodillas, y no las del corazón. O viajar, pero sola. Por que así tal vez se olviden las penas, el amor, o simplemente quiénes somos

viernes, 4 de diciembre de 2015

El beso que cambió todo

Un beso si que cambia las cosas. Tal vez pensabas que no, pero desde ese beso ya nada es como antes 
A veces no somos conscientes de la trascendencia de nuestros actos hasta que vemos las consecuencias.
Por eso puedo decir que si, que un beso lo cambia todo. No se puede pretender que las cosas sigan siendo como siempre
Y no puedo negar que a veces lo pienso, ¿qué hubiese pasado si ese viernes día 14 no hubiésemos hablado? Seguramente todo seguiría siendo como siempre, amigos que a veces hablan y que se tienen mucho cariño. 
Pero tal vez nuestra relación nunca fue de "sólo amigos", y durante este tiempo siempre había habido algo más, y algún día tenia que pasar. Por que como dicen todo ocurre por alguna razón.
Pero a pesar de todo, he de decir que te echo de menos, echo de menos como me abrazabas, o las continuas bromas que teníamos, por que sí, desde ese beso, ni tu ni yo somos los mismos.