Y de repente te encuentras que tienes todo lo que siempre has deseado. Sin embargo algo te impide disfrutarlo completamente. Te inundan miles de pensamientos negativos, y tratas de eliminarlos, pero sin embargo eres incapaz.
Esto puede provocar que no te fíes completamente de una persona, a pesar de que te haya demostrado infinitas veces que si puedes hacerlo. Puede provocar que tus relaciones acaben siendo un fracaso. Por que quién quiere a alguien que es incapaz de dominar su mente y no puede confiar en alguien.
Continuamente te culpas, piensas qué es lo que estas haciendo mal. ¿Por qué no puedes corresponder a la otra persona y darle un 100% de ti?
O todo lo contrario dar de ti un 120% y considerar que la otra persona no te corresponde ni con un 50%
Y es que no podemos olvidar que nuestra mente puede llegar a ser nuestro peor enemigo.
Alguien alguna vez dijo "La mejor forma de olvidar a alguien es convertirle en literatura" y desde entonces no he parado de escribir.
lunes, 25 de abril de 2016
sábado, 9 de abril de 2016
No hay éxito sin fracaso
¿Cuántas veces no hemos hecho cosas por miedo a no saber lo que pasaría, y que saliese mal?
Nuestra mente puede ser nuestro peor enemigo. Hemos perdido mil oportunidades de hacer cosas que nos gustan, de arriesgar, sólo por el miedo a la incertidumbre que eso nos provoca.
Siempre es mas fácil quedarse en nuestra zona de confort, seguir donde estamos, sin tener que arriesgar.
Pero entonces un día te despiertas, y te das cuenta que ya no puedes cambiar el pasado. Tan sólo puede arrepentirte de todas esas cosas que no hiciste y te gustaría haber hecho, pero que no intentaste por el miedo a que algo pudiese salir mal y fracasar.
Pero lo mas importante es que fracasar nos enseña a valorar el éxito. Porque no hay que olvidar que no existe el éxito sin fracaso.
Nuestra mente puede ser nuestro peor enemigo. Hemos perdido mil oportunidades de hacer cosas que nos gustan, de arriesgar, sólo por el miedo a la incertidumbre que eso nos provoca.
Siempre es mas fácil quedarse en nuestra zona de confort, seguir donde estamos, sin tener que arriesgar.
Pero entonces un día te despiertas, y te das cuenta que ya no puedes cambiar el pasado. Tan sólo puede arrepentirte de todas esas cosas que no hiciste y te gustaría haber hecho, pero que no intentaste por el miedo a que algo pudiese salir mal y fracasar.
Pero lo mas importante es que fracasar nos enseña a valorar el éxito. Porque no hay que olvidar que no existe el éxito sin fracaso.
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